El concepto de la educación en línea o el “e-learning” usualmente está vinculado al ámbito académico, desde K-12 hasta la educación subgraduada y graduada. Este método de enseñanza ha permitido que los alumnos reciban una educación personalizada y diversa, y a la misma vez económica y conveniente. Sin embargo, dado el aumento de reconocimiento de la educación virtual, este fenómeno ha dado paso a nuevos tipos de educación virtual.
En la revista en línea The Tech Edvocate, el escritor y educador Dr. Matthew Lynch nos introduce a la educación en línea corporativa en su artículo titulado “Corporate VS. Educational E-learning”. ¿Qué es esta nueva rama del e-learning, y cómo se diferencia de la educación en línea académica?
De acuerdo al Dr. Lynch, la educación en línea académica se centra en la “transferencia de conocimiento”. Es decir, el propósito de este enfoque es proveer al estudiante una enseñanza diversa que abarque una gran variedad de disciplinas. Esto asegura que, al culminar los cursos, el alumno tenga un entendimiento claro y abundante de las diferentes areas de conocimiento que los ayude a aplicar sus conocimientos de varias formas.
Como Lynch dice, “la última meta en el ámbito académico es enseñar a los estudiantes cómo aprender en una variedad de disciplinas en vez de aprender habilidades específicas”.
Mientras el “e-learning” académico ofrece una educación más amplia, los cursos en línea corporativos tienen como objetivo desarrollar las destrezas de los usuarios que sean específicas a sus roles dentro de sus trabajos. Esto no solamente ayuda al empleado a realizar sus responsabilidades de una forma más efectiva, sino que también fomenta el crecimiento de la compañía.
Más allá, la implementación de estos métodos de enseñanza en las empresas pueden ser un elemento esencial en disminuir el déficit de competencia técnica entre los trabajadores, el cual Dr. Lynch afirma que está muy presente en la fuerza laboral actual.
Sea académica o corporativa, ambas ramas de la educación en línea comparten una característica: conceden la autonomía al alumno y al instructor/la empresa. El instructor tiene más control sobre la organización y el material que incluye en sus cursos. A través de la recolección de data y analítica, el instructor puede modificar sus cursos para que los mismos sean más efectivos para sus estudiantes. Igualmente, las empresas pueden detectar qué destrezas sus empleados necesitan mejorar y pueden personalizar la enseñanza para desarrollar dichas habilidades. En tanto, el alumno recibe una educación individualizada a sus necesidades, y tiene la libertad de estudiar desde cualquier lugar y a cualquier hora. El surgimiento del “e-learning” corporativo es un testamento a la versatilidad de la educación virtual. La formo en la que un individuo aprende efectivamente puede variar de persona a persona, y la educación en línea ayuda a unir la necesidad educativa del alumno con el diseño de cursos.
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